A finales de la edad media, el mediterráneo se encontraba infectado de corsario y sarracenos que atacaban a los barcos que atravesaban robando y llevándose a muchas personas cautivas de España por este motivo aparecieron almas que ayudaban a los cautivos. Uno de ellos fue San Pedro Nolasco quien con sus oraciones rogaba a la Virgen María para que lo iluminara a fin de rescatar a los esclavos que sufrían tan triste situación. Con su dinero rescato a muchos esclavos hasta que la noche del 1º de agosto de 1218 estando San Pedro Nolasco en oración se le apareció la Virgen María y le animo, dándole el encargo de formar la orden Religiosa de la Merced para la redención de los cautivos.
Al poco tiempo, ayudado por don Jaime el Conquistador y el dominico San Raimundo de Peñafor, cumplían ese mandato fundando la nueva orden religiosa de los Mercedarios hicieron el voto de consagrarse a la libertad de los cristianos prisioneros por los sarracenos y algunas veces quedándose ellos en lugar del cautivo, cuando no bastaba el rescate.
Así a través de los miembros de la Orden religiosa de la Merced la Virgen María alivio el dolor de sus hijos y de todos los que sufrían cautiverio. Esta devoción se ha extendido por toda España y es Patrona de la ciudad de Barcelona, de Jerez de la Frontera, en la ciudad de Abades, y en muchísimas ciudades que aman y veneran a la Santa madre de Dios y confían en su intercesión si es para bien del cuerpo y el alma.
(Difundido en internet)
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